![]() |
La rotoscopia es una técnica de animación que se remonta al año 1912, inventada por Max Fleischer. Esta técnica consiste en re-dibujar un video, de esa manera el resultado final adquiere una cualidad realista. Idealmente la rotoscopia calca cada fotograma de una secuencia fílmica, sin embargo se pueden obviar ciertos cuadros dependiendo de la velocidad y estilo que se le quiera dar. Y justamente estos dos filmes de Linklater están hechos bajo el alero de esta técnica.
Ambas películas son el
ejemplo perfecto de cómo un recurso técnico se pone al servicio de la historia
para favorecerla y justificar su temática. Si
en Waking Life la animación logra hacer
parecer todo el metraje un sueño, entonces en A Scanner Darkly lo hace parecer una alucinación.
“Dream
is destiny” anuncia la hija de Linklater al inicio de Waking Life (2000), como marcando el sendero ineludible por el que
deberá transitar el protagonista. La película entera fue grabada con una cámara
Mini DV y luego animada por diferentes
artistas, razón que le dio tratamientos diferentes a las escenas a lo largo
del film; un sueño es diferente cada vez, ¿cierto? Waking Life muestra el sueño lúcido de un joven que va teniendo
conversaciones cuyo temas van desde el existencialismo, la filosofía, el arte y
la política. Su conflicto es no poder despertarse, estar condenado a vagar por
los caminos oníricos y discursivos del pensamiento.
Waking Life medita sobre los problemas metafísicos del ser
humano. Si bien el conflicto nace desde el hecho de que el protagonista no
logra despertarse de un sueño, todos los problemas tocados a lo largo de la
trama versan sobre la realidad del hombre como un ser social e individual. El
sueño parece ser la vida misma y la realidad no es más que un espacio relativo.
Si en Waking Life el estilo de la
animación apuesta por trazos más libres e inseguros, con fondos temblorosos y
vivientes, y por supuesto un estilo cambiante por la razón de ser hechos por
manos artísticas diferentes. Entonces en A
Scanner Darkly la animación adopta una estética solamente, que unifica la heterogeneidad
que antes vimos en Waking Life. Acá
se nota una mayor perfección y minuciosidad a la hora de ejecutar la animación.
El trazo es más fidedigno a lo que suponemos fue la grabación. Pero en el film del sueño sirven las líneas
descuidadas y amorfas porque reafirman su calidad surrealista. Mientras que la
fidelidad de la animación en A Scanner
Darkly transporta a la narración al plano realista, donde podemos ser
espectadores externos de las alucinaciones de los personajes.
A
Scanner Darkly (2006) está basada en la novela homónima del escritor de
ciencia ficción Philip K. Dick. Es una historia ubicada 7 años después del año
actual, por lo que nunca perderá su vigencia futurista ni tampoco exagera con el
planteamiento de un año excesivamente alejado de nuestra realidad. En este
tiempo las drogas se han apoderado de la sociedad y hoy la lucha es contra la sustancia D, una droga de gran
popularidad que va destruyendo el cerebro de los consumidores. Keanu Reeves
interpreta a un policía incógnito que debe luchar contra la sustancia D y para
eso debe vigilar a un grupo de drogadictos y una posible infiltración en la agencia
donde trabaja.
Si bien A Scanner Darkly puede ser vista como
una historia dotada de giros argumentales interesantes (con esto me refiero a
inesperados) no es su característica más trascendental, ya que el film se constituye como un manifiesto
humanista que redime a los drogadictos de su condición dependiente de una
sustancia y todas las posibles consecuencias degradantes que esta sustancia
puede causar en su vida.
Pero no sólo busca la
redención, sino que plantea un
terrorífico escenario de control sobre los individuos ignorantes e
ingenuos. Es la mente de Philip K. Dick que es capaz de crear espacios tan
llenos de miedo y observación.
Podemos afirmar que los
dos films no sólo comparten la técnica de animación, sino que la figura del
escritor está presente en ambas historias; en la segunda por tratase del autor
de la novela en cuestión, y en Waking
Life es citado por el mismo Linklater que interpreta un pequeño rol en la
historia.
Una
mirada a la Oscuridad, título en español que lleva A Scanner Darkly, se vive con la ansiedad de drogadicto, con el
tambaleo de la dependencia y la aceleración y aletargamiento de una mente empujada
por los psicotrópicos. Y al igual que su antecesora, vuelve a temas
ontológicos: el engaño de la visión. ¿Qué es y qué no es? ¿Es que de verdad me
encuentro conversando con una cucaracha?... Un encuentro con El Almuerzo Desnudo (1991) de
Cronenberg, sólo que la plasticidad cronenbergiana mutó a colores y líneas que
simulan la realidad en dos dimensiones.
De repente la voz en off
de Keanu Reeves se hace un tanto patética y redundante. Como la narración que
hace Rick Deckard en la primera versión de Blade Runner y que luego fue
eliminada en el Director Cut. Pero la
visión paternal, que nace desde la mano de Philip K. Dick y que Linklater
respeta en su film, es emotiva y
humanista.
En Waking Life y A Scanner
Darkly contemplamos cómo el control
esclaviza al ser humano, en la primera es la misma mente la que ata al
individuo a la incertidumbre, mientras que en Una Mirada a la Oscuridad son agentes externos los que encadenan la
existencia humana. Dos films para ver con una mirada crítica. Es un Linklater filosófico
y contundente hablando en un lenguaje animado sobre lo social.
Me encantan ambas películas, están sin duda en mis tops personales de animaciones favoritas y de películas favoritas en cualquier formato. Son maravillosas. Incluso con lo poco que me gusta Keanu Reeves el 99% del tiempo, en "A scanner darkly" le perdono todo.
ResponderEliminarSaludos.
interesante lo que escribes, sin embargo en la última parte respecto a waking life, no coincido plenamente en que la perspectiva del control esté encarnada en la mente del que sueña sin parar, lo cual si personalmente (la primera vez que vi la peli) resulta un tanto angustioso por la falta de costumbre tal vez de ver un formato como aquel cuya linea temporal es onírica. Me parece que posicionarse en los extremos, individualimo exacerbado o un determinismo social activo sobre un sujeto pasivo, es lo que te atrapa en la realidad que bien puede no ser tal, asi como escribes mas arriba: "El sueño parece ser la vida misma y la realidad no es más que un espacio relativo"
ResponderEliminar