Stoker
Park Chan-wook
Estados Unidos
2013
Stoker, que acá a Chile llegó como Lazos Perversos, tiene la particularidad de proyectarse en dos
pantallas diferentes al momento de visionarla. Me refiero a que queda un gusto
de dos sabores luego de verla, una cosa agridulce
si se tiene en cuenta el tenor del filme.
Parto por lo
dulce entonces. Stoker, narra la
historia principalmente desde el punto de vista de India (Mia Wasikowska). Ella
es una joven de 18 años que acaba de perder a su padre en un trágico accidente
y que abruptamente recibe la visita de su tío el día del funeral de su
progenitor, desde ese momento ella se ve involucrada en una serie de hechos “perversos”.
Ahí es donde va naciendo un thriller, que, como todo thriller debe llevar una
historia por debajo de lo evidente, funciona a la perfección con los argumentos
retorcidos de Park Chan-wook. Y si antes
ocupó a la venganza como eje principal de sus historias, esta vez será el turno
de la maldad.
La maldad vista
como un componente intrínseco en algunos individuos, he ahí la perversidad del
asunto. Stoker va desarrollando
progresivamente a los personajes que nos van dando cuenta de su naturaleza execrada
para el ciudadano común. Un filme con
aires lúgubres que nunca pierde el tono funerario del principio,
perfectamente acompañado por la banda sonora a cargo de Clint Mansell y
visualmente impecable.
India de por
si es un personaje misterioso. Una muchacha oscura, silente y excéntrica que
llevaba una cercana relación con su padre. Toda una Merlina sólo que sin el
aire caricaturesco de la familia Addams. Es este personaje el que otorga toda
la atmosfera anacrónica y vampiresca a Stoker,
encontrando un fuerte contraste con el personaje de Nicole Kidman, su madre… ¿Recuerdan
la relación entre Winona Ryder y Catherine O'Hara en Beetlejuice? Madre e hija eran agua y aceite, ambas construidas
desde los tópicos vida/muerte, luminosidad/oscuridad o lujo/ascetismo. Acá pasa
lo mismo aunque nuevamente sin el componente comedia en su trama. Desde ahí se va construyendo un filme reservado
con ciertos ribetes góticos en su estética que poco a poco va dejando en
evidencia el origen turbulento de su autor… Stoker comienza siendo la típica historia de suspenso, con el
típico nombre de terror (Lazos Perversos) y con el típico póster promocional,
pero si nos fijamos bien en la firma del pintor podemos leer con un poco de dificultad:
Park Chan-wook, y es justamente ahí donde las cosas NO se vuelven típicas.
Antes de
meterme con el creador, decir que se agradece tener este tipo de filmes
atípicos en cartelera. No sólo porque le da frescura a una vitrina que no se
agota de ofrecer el mismo menú, sino también porque es importante despertar al
espectador entumecido, por estas mismas estructuras narrativas, con golpes
visuales que poco a poco intentan meterse en el tan ansiado mainstream. Basta con decir que al finalizar la proyección nadie aplaudió
en la sala (en Chile es costumbre aplaudir al término de cada película,
aunque sea el bodrio más grande de todos). Un ánimo perturbador invadió al
público que silente abandonó la sala, tal vez preguntándose qué cosa les había
puesto tan inquieto el espíritu. Y es en este punto donde viene la parte agria del asunto.
Aclarar que Stoker se trata de su primer trabajo
estadounidense, hecho que suscitaba interés por saber qué haría el surcoreano
en tierras yanquis con el inglés como lengua principal.
Stoker es uno de los trabajos más tímidos de Park. Profundamente
contenida en la banda visual, para nada visceral como nos tenía acostumbrados y
moldeado por el dispositivo norteamericano de hacer cine. Finalmente the american way se impone en la obra de
uno de los directores contemporáneos más interesantes de la escena oriental.
¿Cómo? Bueno, dándole libertad en ciertas proezas estilísticas, como es su
costumbre, pero censurando la historia para transformarla en algo convencional.
A eso me refiero con que poco a poco vamos viendo a su turbulento autor, porque
no son más que unos exiguos momentos,
tratados con bastante cuidado, los que dan atisbos del estilo violentamente
romántico del director. Por eso también la desconcertación oculta del
público, porque posee pequeños poros de salida que sin duda logran incomodar al
espectador, aunque no del todo. Hay en Stoker
una especie de orgasmo aguantado, un giro argumental que nunca llega a aparecer,
por eso digo que la firma del pintor se ve con cierta dificultad. Es la
reacomodación de un estilo para calzar a los gustos estéticos del espectador
occidental que no esperaba más que el típico thriller palomitero. Pero este filme no llega a ser ni típico del género ni
típico de su autor. Es una especie de
híbrido hecho para calzar a los gustos de la industria y a los gustos de su
creador, pero que finalmente no se arriesga ni por lo uno ni por lo otro,
quedando a la deriva y tal vez al olvido de muchos.
Personalmente
creo que si se decide cambiar la factoría de un filme para llegar a una mayor
cantidad de público, aunque eso signifique sacrificar parte del sello autoral,
entonces prefiero que siga el desconocimiento de la obra con tal de que esta se
mueva por el viral mercado de la internet. Me pregunto cómo hubiese sido Stoker si hubiese sido filmada en Corea
del Sur, donde los mecanismos de censura evidentemente van por otras vías.
Bueno, no puedo opinar sobre el film porque la película aún no ha llegado a España. Sí que me llama la atención esa teoría sobre el cambio del coreano, ahorrando cierta viscelaridad a la trama, para sortear la censura americana. La verdad es que supongo que consciente de que no podía dar rienda suelta a su violencia, ya habra´escogido una historia propicia para ese cierto cambio de registro. La verdad es que yo la espero con unas ganas enormes. De hecho, pensando ahora, Thirst o I'm a cyborg, ya eran de alguna manera menos violentas y no por ello, según mi opinión, nada desdeñables.
ResponderEliminarEn fin, gracias por este "avance" y espero opinar en breve.
Un abrazo.
Para nada desdeñables David, de hecho "Thirst" sigue siendo mi favorita del coreano, pero es su rareza la que le otorga el sello Park. En cambio Stoker no brilla ni por su rareza ni por su violencia.
EliminarSaludos!
Bueno, leyendo que "Thirst" es tu película favorita de Park Chan-Wook me queda claro que estamos posicionados en puntos extremos respecto al director. "Thirst" es mi película menos favorita de él en toda su filmografía, de hecho la odié un poco. Aunque leyendo tus argumentos respecto a "Stoker" pienso que probablemente "Thirst" sea la más arriesgada en su filmografía, lo que para mí al menos no fue un mérito. Pero supongo que ambas concordamos en que es, indudablemente, un gran director.
ResponderEliminarConforme pasa el tiempo "Stoker" me gusta más, ¿qué te puedo decir? Siento que la entiendo y la siento más. Por otro lado no creo que hubiese un 'si "Stoker" hubiera sido hecha en Corea' porque todo en ella es muy estadounidense. Seguro que si Park no hubiera querido dar el salto de continente, hubiera optado por un guión propio.
Saludos.
Tal vez ese "hubiese" es erróneo de mi parte; Sí que hay bastante de estadounidense en Stoker y algo completamente diferente hubiese salido en otro territorio. Es mi principal problema con el filme. Y cada vez que me hago el panorama completo del trabajo de Park siento esa película como un punto molesto en todo el dibujo. Pero si algo el pensamiento inverso, de verla sólo como una individualidad, sí resulta novedosa y atractiva. Creo que ese ejercicio es hacia el infinito jej..
EliminarSaludos.-
Yo creo lo mismo que S. Stocker, es una gran película del coreano, y más que lamentar que se haya moldeado al cine estadounidense, es más bien una puerta que se abre a realizadores que brindan otra mirada y percepción del mundo, en cierta forma Stocker parece una respuesta lógica y una inversión a Thirst, donde la sangre - más no la violencia- toman protagonismo; afortunadamente la película llegó a las salas latinoamericanas y tuvimos la oportunidad de ver la última obra del coreano, eso sí, lejos de ser una obra maestra,- como su trilogía de la venganza- es una interesante y posiblemente de lo mejor en cartelera con el festival de Eurocine, que están presentando en el país (Colombia). Un saludo desde el país que ya no aplauden después de una película, sino que hablan durante ésta, por que no entienden :) Saludos
ResponderEliminarEs una puerta algo tramposa. Ahí entraríamos en el problema de cuánto es posible adaptarse para llegar a una mayor cantidad de público... Apocalípticos o integrados como diría Eco. Una cuestión para una entretenida discusión Andrés. Saludos!
Eliminar