Mostrando entradas con la etiqueta 2011. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta 2011. Mostrar todas las entradas

miércoles, 14 de agosto de 2013

A TRAVÉS DE LENTES BIEN ENFOCADOS




POLISSE
MAÏWENN LE BESCO
2011
FRANCIA


Cada vez es más común que los neorrealizadores franceses desarrollen historias desde lugares en los cuales se comprometen a reflejar temáticas sociales. El público, la crítica y hasta la industria, no parecen quedar fuera de estas nuevas proclamas, que traen de vuelta al hombre común y a su incansable y encomiable lucha contra algo que él mismo, se ha encargado de hacer brutalmente incontrastable… la Sociedad misma.


lunes, 29 de julio de 2013

UNA BRILLANTE SEPARACIÓN


Jodaeiye Nader az Simin
Asghar Farhadi
2011
Irán


Una de las películas más impecables de los últimos años. El manejo del drama y la inteligencia en el entramado de sus diálogos le otorgan un gran ritmo a un film que no nos hace recoger pistas, sino cosechar moral.

Nader y Simín se están separando (Payman Moadi y Leila Hatami). La cámara que parece fija, a ratos oscila con pequeños movimientos. Escuchamos la voz de una tercera persona. Un juez que no logramos ver. La película aún es muy joven, pero Asghar Farhadi,  - Director iraní del film – ya nos pide que nos pongamos en el papel de observadores de los acontecimientos que han de devenir.

jueves, 11 de abril de 2013

ESTO NO ES UNA PELÍCULA



This Is Not A Film
Jafar Panahi, Mojtaba Mirtahmasb
2011
Irán

¿Qué hace que una película sea realmente una película?... ¿Su sucesión de fotogramas? ¿La yuxtaposición de planos? ¿El reconocimiento de una historia, sea cuál sea su naturaleza?... En fin. El cuestionamiento del quehacer cinematográfico y de su posterior resultado en una obra artística nace en respuesta luego de haber visto el interesante filme-ejercicio This is not a Film.

martes, 12 de febrero de 2013

AMIGOS Y ANTÍPODAS



Intouchables
Olivier Nakache, Eric Toledano
2011
Francia

El contraste no solo marca diferencias sino que también funciona como complemento para dos elementos evidentemente opuestos. Yo tengo amigos que no sé cómo, pero los aprendí a querer a pesar de nuestras indiscutibles diferencias cinéfilas y musicales, ¡y vaya qué diferencias! Al parecer la historia me ha demostrado que la convivencia es posible. Sin embargo, la contraposición es divertida y es pedagógica porque entre ambos elementos las diferencias se explican de manera mutua. Los gustos no viven en un espacio solitario, sino que se vuelven interesantes en esa misma oposición.

viernes, 8 de febrero de 2013

LA SEXUALIDAD DEL CAPITALISMO



Shame

Steve McQueen

2011

Reino Unido

El segundo trabajo del director Steve McQueen es una pieza fría y contenida que habla sobre los oscuros deseos humanos. En su mira tiene a Brandon, un treintañero que al parecer le va bastante bien en la vida. Ha logrado tener éxito en su trabajo, tiene la confianza, o por lo menos la atención de su jefe, vive en un cómodo departamento en Nueva York, es atractivo y parece seguro de sí mismo. Pero Brandon está obsesionado con el sexo. Vive entre la soledad emocional y la compañía permanente de putas y páginas de internet de pornografía. Entre masturbaciones y encuentros sexuales fugaces que son tratados con mucho cuidado. Pero la rutina de Brandon se ve interrumpida por la llegada de su hermana menor.

lunes, 25 de junio de 2012

LA SONRISA DE TODAS LAS PUTAS

L´Apollonide (Bertrand Bonello, 2011)


Con una interesante propuesta de montaje, L'apollonide narra la vida diaria en un burdel de París a fines del siglo XIX. El oficio de la prostitución es retratado de forma espontánea y lúcida, dejando de lado los lugares comunes tan presentes en la filmografía de esta temática.

Las protagonistas y prostitutas de L'apollonide parecen personajes sacados de un cuadro del renacimiento. La naturalidad que rodea sus cuerpos desnudos va de la mano con la crueldad del oficio; la postergación del placer personal para servirlo al placer ajeno es una contradicción atada como una maleta permanente a la espalda. Y que es simbolizada de manera cruda y visceral en el rostro desfigurado de una de las prostitutas. Una sonrisa constante que contrasta con la tristeza de sus ojos.

La película de Bonello parece dignificar el trabajo más antiguo del mundo, y con una música contemporánea la dota de capacidades mágicas para transportarla a nuestros tiempos. Sin lugar a dudas no se trata de una película de época, sino de un drama contingente.

Tal vez no muestre grandes maestrías a nivel de guión, sobretodo llegando hacia el final, pero se encarga de contar una historia que a momentos alcanza una claridad preciosa.

lunes, 30 de abril de 2012

EL REFUGIO QUE FALTABA

Take Shelter (Jeff Nichols, 2011)
Jeff Nichols nos presenta un drama psicológico con fuertes sabores apocalípticos, recordando al estilo de Shyamalan ocupado en The Happening y a la internación psicológica que muestra Von Trier en Melancholia. Una combinación poco usual que se interna en los caminos del miedo y la locura, siempre llevada de la mano por la impecable actuación de Michael Shannon.




domingo, 15 de abril de 2012

CON GUSTO A POCO CRONENBERG

A Dangerous Method (David Cronenberg, 2011)
La película nos narra las relaciones entre mentor, discípulo y paciente; Sigmund Freud, Carl Jung y Sabina Spielrein respectivamente. En un drama histórico cargado de psicología que hace despojarse al canadiense de su estilo más característico. Muy austero y clásico. El enfoque está puesto sobre los personajes que de acuerdo al contexto situados actúan de manera muy premonitoria; las diferencias raciales es una pulsión que funciona a nivel narrativo, ya que dota a la historia de un entramado más denso y oscuro.

La sexualidad en el comportamiento humano es el tema de la película; con Vincent Cassel, que nos brinda una fresca actuación, exponiendo su no represión a los impulsos hace dudar a Jung. Y por mientras él también duda de la “sexualidad en el centro de todo” promulgado por Freud. Entremedio de toda esta tormenta emocional para un joven Carl Jung, conoce a su paciente Sabina, la cual lo interna en esta selva de pulsiones sexuales e interpretaciones oníricas. Pero a pesar de lo sabroso que puede presentarse el tema para Cronenberg, nos encontramos frente a un tratamiento insípido, muy políticamente correcto. Tal vez es la condición de historicidad a la que está sometida la trama la razón del por qué tanta contención. ¡Es que los personajes no se despeinan! son maniquíes tratados con cuidado que se transforman aburridos. De hecho la actuación de Keira Knightley abruma por la misma mesura de toda la película.  

A Dangerous Method es tal vez el trabajo más ecuménico de Cronenberg. Pero yo prefiero por sobre todo la inmadurez cinematográfica que poseía antes de pasar el mileno, ya que la psicología y la sexualidad tratada en Crash es mucho más poderosa que la interpretada por sus mejores referentes en A Dangerous Method.




jueves, 12 de abril de 2012

VELOCIDAD BIEN MANEJADA

Drive (Nicolas Winding Refn, 2011)
Entre tantas películas que tengo en mi lista para ver (cosa que se va agrandando de manera exponencial) y no me había dado el tiempo de ver justamente esta; Drive es toda una experiencia cinematográfica. Es un golpe seco en la cabeza que parece llevar un ritmo muy cadencioso, pero simplemente, no te da respiro.

La película tiene como protagonista a Ryan Gosling, que interpreta un papel para recordar. El hombre sin nombre es doble de acción en escenas de automóviles, mecánico y una especie de transportador que carga ladrones de la escena del crimen sin ser vistos. Es un héroe oscuro, que revela su identidad al ir avanzado la trama a través de un desarrollo pausado, silente y bien manejado. Las líneas morales y éticas del héroe son difusas. Recuerda a los westerns, donde estos códigos también eran ambiguos en el protagonista, dándole un sabor especial, alejándolo del idealismo y de la creación de personajes lo suficientemente buenos como para que todas sus acciones parezcan predecibles, tanto, que caen en la inverosimilitud.  



viernes, 6 de abril de 2012

NI CHICA NI LIMONADA

La piel que habito (Almodóvar, 2011)

Almodóvar es un buen contador de historias, eso es innegable. Todavía recuerdo la primera vez que vi Pepi, Luc, Bom y otras chicas del montón y mis risas salían sinceras a pesar del sin sentido con el que estaba hilada la trama. Bueno, con La piel que habito me pasó algo similar, sólo que las risas fueron omitidas.

Antonio Banderas es Robert, un doctor empecinado en la experimentación de un nuevo tipo de piel que hubiese salvado a su difunta esposa de sus quemaduras. Como cirujano plástico no tiene escrúpulos ni ética. Al parecer su corazón está muy dolido como para sentir empatía. Su piel es la de un reptil; áspera, dura, impenetrable. Y así mismo es el mundo narrativo; hay una distancia muy grande entre el espectador y lo que se muestra, casi vemos a escondidas los nudos que en el van aconteciendo. Somos estudiantes de medicina paseando por los fríos pabellones. ¿Pero importa acaso importa mirar? Cuando lo ridículo intenta disfrazarse de dramático no hace más que aumentar su ridiculez, y funciona cuando el sentido es revelado, como pasa por ejemplo en Muertos de la risa. Pero acá no es más que una acumulación de giros que llegan a ser ingeniosos. SPOILER como sucede al enterarnos que el personaje de Vicente se transforma en Vera, y se hace lógico el flashback que parte desde la mujer en la cama FIN SPOILER. Pero hay una delgada línea entre el ingenio y el hecho forzoso. La película está lleno de estos últimos.

La piel que habito es un engaño bien construido, que puede pasar por un melodrama que llega a emocionar a muchos, sin embargo, estamos frente a una comedia tan deformada que es imposible llegar a reírse. 


jueves, 22 de marzo de 2012

CARNAGE


Carnage (Roman Polanski, 2011)

Carnage es la involución de lo políticamente correcto. Una lección para el “adulto responsable” y los que se creen moralistas.
El argumento es bastante simple: dos matrimonios reunidos por el conflicto de sus hijos menores (uno de ellos golpeó el rostro del otro con una vara) La historia se sucede en la casa de uno de los matrimonios (Jodie Foster y John C. Reilly) y sin la presencia de los niños. El sustento de la trama se da en la discusión, la cual siempre se va originando en pares conflictivos, no necesariamente la de la pareja de matrimonios, sino también intercambiando, generándose las más interesantes en los pares femeninos y masculinos. Una rivalidad de géneros eterna. Es casi automático que las mujeres busquen como compañeras de lucha a otra mujer y así mismo lo hagan los hombres. Es casi genético.
Carnage es una comedia ligera que hace reír por lo ingeniosa de la situación, aunque algunas veces parece un poco forzado el hecho de que la pareja de visita (Kate Winslet y Christoph Waltz) nunca logré abandonar la casa. De esta manera el buen trato y los modales van dejándose de lado a medida que estos personajes van tomando más confianza. La regresión hacia el caos es inevitable, hasta que el Dios Salvaje se hace presente en cada palabra escupida por los comensales. Son adultos tratando de resolver problemas de niños, o niños tratando de resolver los asuntos de sus hijos. No. Los niños no suelen ser tan problemáticos.
Una radiografía actual y necesaria. Un buen acierto de Polanski. 


martes, 13 de marzo de 2012

Kaurismäki / Allen


Generalmente cuando se habla de las características de algún elemento en particular, se necesita con anterioridad saber de su opuesto. El concepto de blanco no se comprendería con totalidad sin tener en conocimiento el concepto de negro. Bajo esta premisa me gustaría poner bajo la lupa a dos directores que nos brindaron un buen deleite este pasado 2011, me refiero a Aki Kaurismäki con su película “Le Havre” y Woody Allen con “Midnight in Paris”. Ambas, utilizando un lugar como sustento de la trama, pero ambas representando la antítesis de cada una de ella en función del estilo de cada director.

Primero, la ubicación espacial de ambas historias es fundamental para el desarrollo de la trama, no solamente por tratarse de componer los títulos, sino por aportar en la atmosfera de ambas producciones. De esta forma Kaurismäki se acerca a lo que Jarmusch hace en Mystery Train, donde todo huele a Memphis. Y Allen se traslada a la representación icónica y real del romanticismo: París.

        

Luego nos vamos directamente hacia los personajes. Kaurismäki siempre les ha dado la mano a personajes del bajo mundo. La pobreza y la humildad es un adjetivo permanente en sus historias y Le Havre no es la excepción, donde un lustrador de zapatos se une con un niño inmigrante para ayudarlo a encontrar a su familia. En cambio los personajes de Woody Allen pertenecen a la clase acomodada, en este caso el protagonista es un escritor de Hollywood aburrido de las superficialidades de su trabajo, buscando en París, la inspiración que necesita para escribir una obra “de verdad”. El dinero y la falta de él constituyen las veredas por donde los personajes de ambos directores transitan sin llegar a cruzar miradas.

El estilo lacónico de Kaurismäki se debe en parte a la escasez de diálogos. Estamos acostumbrados a presenciar la contemplación de sus protagonistas, aunque siempre, con frases concisas. Y en oposición ver una película de Allen es, al igual que su filmografía, una proliferación de frases ingeniosas que inundan la boca de sus personajes. Mientras Kaurismäki los enmudece, los de Allen no cesan la verborrea.

miércoles, 7 de marzo de 2012

"SINE MUDO"

Título: The Artist (El Artista)
Director: Michel Hazanavicius
Año: 2011
País: Francia




Hay quienes piensan que todo tiempo pasado fue mejor. Una premisa que los inconsolables llevan como estandarte. Pues The Artist es una de esas películas que “intentan” rememorar el pasado; las glorias de Hollywood de las décadas 20 y 30. ¿Y cómo? Bueno, haciendo una película completamente muda en pleno siglo XXI. Lo que se trató de hacer con The Artist es emular el cine mudo, copiando descaradamente todos los códigos cinematográficos que se utilizaban en ese momento (transiciones de plano con fundidos, actuaciones teatrales de los actores, utilización de la banda sonora como apoyo fundamental para subrayar emociones y obviamente el blanco y negro). Para que quede claro, estos son sólo algunos elementos característicos del cine mudo que pertenecen a un lenguaje particular dentro del cine en general. Y son componentes que fueron naciendo debido a las limitaciones técnicas existentes en el momento. The Artist en cambio no posee esas limitaciones. Sólo se basa en el lenguaje, pero evidentemente no lo sabe hablar con naturalidad. Es escuchar a Brad Pitt en Inglorious Bastards intentar hablar italiano. Es un acento forzado, una falsedad, una narración ingenua que sin la parafernalia del cine mudo se derrumba. Y este engaño fue escogida la mejor película por los mismos que piensan que todo tiempo pasado fue mejor. Y no soy devota de los Oscar para nada, sin embargo, es irrefutable la influencia que tienen estos premios a nivel mundial y a nivel de taquilla. Es publicidad automática para quienes salen victoriosos. Es el cine que va a llenar las salas y en unos años más verán en su televisión por cable día a día. Entonces ¿podríamos llamar a eso justicia, independiente de que simpaticemos o no con los festivales?

Los verdaderos clásicos del cine mudo se hicieron hace ya muchas décadas, y son esos, los que remasterizados deberían volver a nuestras memorias.

martes, 6 de marzo de 2012

LA MAGIA DE SCORSESE


  Título: Hugo (La invención de Hugo)
Director: Martin Scorsese
Año: 2011
País: USA




Cuesta entender que Scorsese podría haber dirigido una película de este tipo: familiar, de aventuras, recalcando la inocencia de alguno de sus personajes, sin la violencia presente en memorables como Godfellas, Main Streets o su más reciente Shutter Island. Sin embargo Hugo se alza como una sincera declaración de amor de Scorsese hacia el cine, dejándola como el trabajo más diferente en su filmografía pero a mi gusto, como el más noble.

Asa Butterfield y Chloe Moretz

Paradójicamente Scorsese nos narra una génesis cargada de romanticismo y nostalgia incursionando por primera vez en el 3D (cosa que todavía no veo, y que debido a mi paupérrima situación monetaria no veré) A pesar de esto he sabido por diversas fuentes, que la utilización de esta técnica queda a merced de la narración, cosa que en muchas otras películas no sirve más que para adornar y despistar donde hay un argumento simplón y superficial. De esta manera lo pasado y lo actual convergen para dar vida a una historia conmovedora no sólo para los que aman el cine, sino para todo aquel que disfrute de una buena película.

Hugo es un huérfano que vive oculto en una estación de ferrocarriles francesa y se encarga de los relojes de la estación. Pero su verdadero interés yace en reparar un antiguo autómata conseguido por su difunto padre. Al conocer a una chica que posee la llave que podría hacer funcionar el objeto la historia de Hugo comienza a cambiar. Y es en los periplos de este chico donde cruza historia con el olvidado director de cine y mago Georges Méliès. Personaje en el cual yace el homenaje que pretende hacer la película.

Escena de Viaje a Luna de George Méliés (1902)

Y así como Hugo anhela dar vida, desea mover lo inanimado, el director juega el mismo rol: está detrás de un relato que durante dos horas nos parece real. De esa forma no nos parece tan extraño un Méliès que pasa de la magia al cine. ¿No será que estamos hablando de lo mismo? El poder del director es creador, pero sólo lo que dura la historia, eso lo transforma en un ilusionista. Hugo es una fantasía exquisita con un París impecable - por algo Robert Richardson ganó el Oscar a mejor fotografía-. Las largas secuencias descriptivas sobre la estación nos dan cuenta de un trabajo de relojero, tal como el oficio de nuestro protagonista, el tiempo es un concepto presente en toda la película: el cine se hace sobre el tiempo, así no cuenta Tarkovsky en su libro “Esculpir en el tiempo”.  

De esta manera Hugo encanta a todos. Una historia solidaria con el espectador y respetuosa con su pasado. El verdadero homenaje al cine aunque los premios digan lo contrario.

Scorsese realizando un cameo en Hugo